BLACK SEA GOLF AND COUNTRY CLUB - BURGAS - BULGARIA

Los terrenos sobre el que actuamos presentan una superficie de 191.80 hectáreas.

Las ciudades utópicas del pasado fueron una reflexión sobre las posibilidades de una vida comunitaria alejada de los defectos de los centros urbanos masificados.

Las urbanizaciones autosuficientes del presente son la plasmación de esos sueños. El proyecto Black Sea Golf and Country Club busca la perfección. Grandes y emblemáticos espacios abiertos comunican entre sí los diferentes módulos de servicio por medio de fluidos accesos que se organizan en torno al campo de golf, lo que crea un conjunto único en funcionalidad y belleza.

VISION DE LOS ARQUITECTOS URBANISTAS:

El complejo Black Sea Golf and Country Club Burgas es un proyecto de planeamiento urbanístico en Bulgaria para el desarrollo de un complejo mixto de campo de golf, vivienda unifamiliar colectiva y un club social.

El proyecto se lleva a cabo en unos terrenos con una topografía irregular y una superficie de 191 hectáreas.

Estos arquitectos urbanistas comienzan la ordenación de los terrenos planteando unos recorridos perimetrales que crean una correcta circulación en toda la superficie de intervención. A partir de estos recorridos y respetando las dimensiones del campo del golf estableces el posicionamiento de los bloques de vivienda unifamiliar colectiva y los equipamientos.

La habilidad de estos arquitectos urbanistas reside en compatibilizar los diferentes usos del programa y comunicarlos con unas circulaciones lógicas. Para ello han trabajado el proyecto en todas sus escalas, desde la ordenación del territorio hasta las distintas secciones de las vías. Es determinante el hecho de tener un dominio absoluto del proyecto en todas sus dimensiones.

La experiencia de los arquitectos se ve plasmada en la multitud de recursos que tienen para resolver cada situación de la mejor manera posible. Todo esto se ve reflejado en los resultados obtenidos en cada una de sus obras. Han trabajado en países como Brasil, México, Angola, Marruecos o Noruega, donde las exigencias son diferentes y los programas muy variados.

Cada programa ha sido un reto del que han adquirido conocimientos que enriquecen su forma de proyectar. Una arquitectura comprometida y honesta que da respuesta a las necesidades de los clientes.